Miedo
octubre 12, 2016
Si piensas que estás vencido, lo estás;
Si piensas que no te atreverás, no lo harás;
Si piensas que te gustaría ganar, pero no puedes, es casi seguro que no lo lograrás.
Si piensas que vas a perder, ya has perdido;
Porque en el mundo encontrarás que el éxito comienza con la voluntad; todo está en el estado mental.
Muchas carreras se han perdido antes de haberse ocurrido, y muchos cobardes han fracasado antes de haber su trabajo empezado.
Piensa en Grande y tus hechos crecerán, piensa en pequeño y quedarás atrás;
Piensa que puedes y podrás; todo está en tu estado mental.
Si piensas que estás aventajado, lo estás, tienes que pensar bien para elevarte.
Tienes que estar seguro de ti mismo, antes de ganar un premio.
La batalla de la vida no siempre la gana el hombre más fuerte o el más ligero, porque tarde o temprano, el hombre que gana, es aquel que cree poder hacerlo.
Napoleón Hill.
Los temores desaparecen en el momento en que los aceptamos y con ello controlamos, dejando paso a una agradable sensación de paz que nos envuelve.
Algunos dicen que la vida es energía. Sabemos que la energía ni se crea ni se destruye, simplemente se transforma. Si entonces, consideramos la vida como una transformación,
¿Por qué preocuparse?.
Aceptar, no querer cambiar las cosas que no podemos cambiar y vivir entendiendo quienes somos, que queremos y porque estamos aquí, nos ayuda a tener una mayor paz y tranquilidad en situaciones o momentos en los que el miedo asome la cabeza; no debemos cortarle esa cabeza tan solo saludarle y hacerle ver que en este momento nos hace más mal que bien e invitarle a marcharse porque no nos aporta nada. Es por ello que tomar la vida como es, un regalo, nos hace tener menor sentimiento de posesión y con ello una mayor gratitud ante lo que venga.
Soñar, vivir, saltar….hazlo, las alas ya se irán haciendo mientras saltamos. El miedo en si no es malo, es una emoción esencial con la que nuestro sistema límbico tiene la finalidad de garantizar nuestra supervivencia. Lo malo es cuando esta emoción se apodera de nosotros, paralizando nuestros lóbulos centrales y no dejándonos pensar y actuar de manera natural y consciente.
Por ello es importante afrontar nuestros miedos, mirarlos cara a cara y decirles “adiós”, difícil lo es, pero la sensación de quitarte un buen peso de encima bien vale pena intentarlo.
Un buen ejercicio para ello es:
1.-Reflexiona sobre tus miedos, identifícalos
2.-Escríbelos con boli en mano en un papel
3.- Identifica su naturaleza
4.-Redacta enumerando detenidamente que sería lo peor que podría pasar si llevásemos a cabo lo que nos da miedo
5.- Lee lo escrito y reflexiona: Qué ventajas e inconvenientes tiene lo escrito? Y tan grave es lo que ocurrir? O quizá podría convertirse en una oportunidad?.
*Lo que la mente del hombre puede concebir y puede creer, lo puede lograr* Hill N.